El annus horribilis de los elefantes
2011 ha sido el peor año, de las últimas décadas, para el futuro de los elefantes africanos. El comercio ilegal de colmillos ha aumentado considerablemente, así como las requisas efectuadas en distintas operaciones. Según los datos de Traffic (Red de vigilancia del tráfico de vida salvaje), durante el año pasado se efectuaron más de una docena de intervenciones.