Así es cómo el ajo puede ayudar a desparasitar mascotas

Así es cómo el ajo puede ayudar a desparasitar mascotas

Escrito por: Ildefonso Gómez Herrera    17 marzo 2017    2 minutos

Cuando hablamos de productos de desparasitación, es evidente que nos centrarmos en primer lugar en los químicos. Es decir, los que se venden en las consultas veterinarias o en las tiendas de animales. Sin embargo, este tipo de artículos, además de poder llegar a ser bastante fuertes, a veces no están totalmente recomendados. Por eso, en ocasiones también es posible optar por productos naturales. Los cuales son más condescendientes con la salud de los animales.

En cuanto a la desparasitación de animales, existe un producto muy natural y cuyos efectos os sorprenderán. Hablamos del ajo. Es tan normal utilizarlo que jamás hubiéramos imaginado que sirviera para desparasitar a las mascotas. Puede prevenir otras enfermedades, aunque vamos a centrarnos en la que nos atañe. En primer lugar, decir que existe una leyenda urbana, la cual afirma que el ajo tiene un componente dañino, la n-propildisulfida. No os preocupéis, no hace daño en los animales siempre que no se use de manera exagerada, es decir, menos de cinco dientes de ajo diarios.

Para que el ajo actúe como antiparasitario es suficiente con que las mascotas lo ingieran. Este elemento es vermífugo, es decir, puede luchar contra los parásitos intestinales. Al llegar al estómago y desencadenar sus efectos, puede depurar la sangre, actuando como tónico digestivo y permitiendo que el organismo se limpie. También fortalece el sistema inmune y sirve para prevenir otros parásitos.

Si queréis que vuestras mascotas ingieran ajo, solo es necesario añadir uno o dos dientes al día en la propia comida. Este proceso se llevaría a cabo durante una semana, para repetir el movimiento más adelante. Lo más recomendable es ejecutar este método una o dos veces al año. Parece poco, pero es suficiente.

En todo caso, teniendo en cuenta que existen unas determinadas dosis que no es recomendable exceder, os recomendamos que consultéis el tema a vuestro veterinario. Así podréis evitar cualquier problema que pudiera surgir.

Vía | The Learning Center
Foto | Wikimedia Commons – juantiagues

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