Cambio Climático: la frecuencia de las olas de calor oceánicas se ha doblado
Ya sabemos que el cambio climático está teniendo consecuencias notables sobre las condiciones climatológicas. Sin embargo, con el pasar de los años, y sin haber solucionado la situación, estamos viendo cómo estos movimientos se están agravando aún más, provocando que tanto animales como Seres Humanos nos veamos afectados negativamente.
Una de las cosas que más hemos notado durante los últimos meses han sido las olas de calor. Aunque tenemos que decir que las mismas se han producido en todo el planeta. De hecho, los propios científicos han confirmado que las olas de calor del océano se irán haciendo más frecuentes y extremas según la Tierra se vaya calentando. Una situación grave.
Para llegar a esta conclusión se han analizado mediciones basadas en satélites de la temperatura de la superficie del mar desde 1982 hasta 2016, comprobando que la frecuencia de las olas de calor marinas se había doblado. Actualmente se calcula que las temperaturas globales promedio aumentarán en 3,5º por encima de los niveles preindustriales para finales de siglo, por lo que la frecuencia de las olas de calor del océano también se podrían incrementar. Se piensa que su frecuencia pasaría de un día a tres.
Por supuesto, el incremento en la frecuencia de estas olas de calor también está teniendo consecuencias negativas en los ecosistemas marinos, algunos de los cuales se están destruyendo.
Thomas Frölicher, climatólogo de la Universidad de Berna, en Suiza, ha confirmado que «las olas de calor marinas son más duraderas, frecuentes, intensas y extensas que en el pasado«, además de avisar de que el aumento de temperatura del planeta ya está por encima de lo que podría esperarse de los cambios naturales que se provocan en el mismo. Por lo tanto, la conclusión es que estas modificaciones se están llevando a cabo gracias a la mano del hombre.
Tenemos que decir que el equipo encargado de esta investigación ya está trabajando para explorar de una mejor manera las consecuencias y cambios de las olas de calor de las que hemos hablado. Sin embargo, estas conclusiones también deberían hacernos pensar acerca de lo que se está haciendo con el planeta.
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