Dedicar la vida el cuidado de las algas
Antonio Muiños es considerado, internacionalmente, como el rey de las algas, además de sus altos conocimientos es muy valorado por haber pasado gran parte de su vida a conocerlas.
Sus trabajos comenzaron en una pequeña conservera gallega de 100 metros cuadrados, que tuvo que abandonar por la competencia de las empresas (en especial las chinas), entonces: «Estudiamos las posibilidades que teníamos y vimos que en el mundo de las algas había un mercado interesante«.
Con el paso de los meses el lugar se convirtió en uno de los más conocidos centros de algas, se había empezado estudiando su ecología y caracterizando las diferentes especies a las que nadie le había prestado atención. Luego de una década ya sabían hasta los valores nutricionales de las diferentes especies. «Al principio, apostamos por trabajar con wakame y espagueti de mar, pero el primer año no conseguimos el permiso para recoger algas. La segunda temporada sí nos lo dieron y después de eso estuvimos dos años y medio de pruebas hasta que pudimos vender la primera alga«.
Pero el caso de Antonio no es el único, d hecho el sector de la biotecnología ha crecido en los últimos tiempos en un 37 por ciento. «Hemos trabajado muy duro para crear una cultura, de la primera partida de 1.000 kilos, vendimos 50 y regalamos 950 kilos». Para lograr su éxito debieron estudiar la ecología, la forma en que se desarrolla mejor el cultivo y así lograr ‘domesticarlas’. En siete años se han creado 80 productos nuevos y en la actualidad están trabajando en 15 nuevos proyectos.
Vía | El Mundo
Foto | Flickr – Aroid