Documentación necesaria para tener un perro potencialmente peligroso

Hace unas horas hablábamos acerca de la documentación necesaria para tener un animal de compañía, mencionando en el propio artículo que existían algunas excepciones. Tener un perro potencialmente peligroso es una de esas excepciones, más que nada porque para poseer uno de estos animales será necesario disponer de documentación adicional y contar con una licencia que nos habilite.

En España tenemos que prestar atención a la Ley 50/1999 de 23 de diciembre, la cual fue desarrollada a través del Real Decreto 287/2002, mediante el cual se determina que los propietarios de perros potencialmente peligrosos tienen que tramitar y renovar cada cinco años una licencia administrativa que les habilite para ser dueños de este tipo de animales. Por lo tanto, si vamos a tener un PPP, es imprescindible poder obtener la documentación legal mencionada.

Para conseguir la licencia que decimos es imprescindible que cumplamos una serie de requisitos:

• Ser mayores de edad.
• No tener condenas por delitas de homicidio, tortura, lesiones, daños contra la libertad, la integridad moral, la salud pública y la libertad sexual de terceros, asociación con narcotráfico o banda armada.
• No estar privado por resolución judicial de adoptar a animales potencialmente peligrosos.
• No tener sanciones por infracciones graves o muy graves, según lo previsto en el artículo 13 de la Ley 50/1999, de 23 de diciembre.
• Tener capacidad física y aptitud psicológica suficiente para responsabilizaros de la crianza de un perro potencialmente peligroso.
• Tener un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros cuya cobertura mínima sea mayor o igual a 120.000 euros. Es necesario presentar el comprobante.

Tramitando la licencia para tener un perro potencialmente peligroso

Si ya tenéis los requisitos mencionados arriba, solo es necesario que superéis un examen físico y psicológico que acredite que disponéis de las capacidades visuales, auditivas, locomotoras y neurológicas imprescindibles para tener un perro de este tipo. Superadas las pruebas, tendréis que tramitar la inscripción del animal en el registro municipal correspondiente a vuestro lugar de residencia.

Por último, debéis tener en cuenta que es imprescindible que llevéis la licencia encima siempre que saquéis a pasear a estos animales. Además, los mismos deben llevar bozal, collar y correa de hasta dos metros en espacios públicos. Es evidente que incumplir las normas tiene consecuencias.

En todo caso, tener un perro potencialmente peligroso también es una cuestión de educación y cariño hacia los propios canes. Estamos seguros que con un aprendizaje correcto las mascotas se comportarán de forma estupenda.

Vía | BOE
Fotos | Pixabay – danielsfotowelt | PublicDomainPictures – Karen Arnold

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