Experimentación con animales: ¿Qué hay de legal en esta actividad?

Experimentación con animales: ¿Qué hay de legal en esta actividad?

Escrito por: Ildefonso Gómez Herrera    3 mayo 2019    2 minutos

La experimentación con animales, ¿es legal? Analizamos las leyes que existen y que permiten regular la actividad.

La experimentación con animales sigue siendo un actividad sobre la que existen todo tipo de opiniones. Mientras que algunas personas están a favor, otras están en contra. Incluso se han puesto en marcha tratamientos alternativos. Sin embargo, también es cierto que es necesario comprobar la legalidad que existe acerca del tema.

Generalmente, la experimentación con animales se realiza en los campos educativos, industrial y de investigación con el fin de comprobar los efectos que tienen diferentes productos sobre el organismo. Aunque es verdad que los procesos llevados a cabo en ocasiones han saltado las normas de la ética. Afortunadamente, algunos países se han puesto las pilas acerca de este tema y han legislado al respecto.

En España, el Consejo de Ministros ha puesto en marcha varias leyes que limitan la experimentación con animales. Por ejemplo, en 2013 la actividad ya se comenzó a restringir en Europa, y en 2014 se empezaba a exigir el registro del nivel de dolor, estrés o angustia que tenía cada procedimiento. De esta forma, existía un mayor control sobre las operaciones.

En 2018 el Ministerio de Agricultura regió análisis del uso de más de 800.000 animales que tenían fines científicos y de investigación. Así pudimos saber que los ratones fueron los animales más usados en experimentos, siguiéndoles peces, aves de corral, ratas y conejos. También se incluyeron cerdos, perros, gatos y macacos.

En todo caso, el camino que queda por recorrer es muy largo. Las leyes apenas han llegado a la regularización de la actividad y existen muchos productos que requieren de una investigación previa. Si queremos evitar la actividad, nuestro hábito como consumidores debería ser el de no adquirir aquellos artículos que no nos parezcan correctos.

Foto | FlickR – Diane

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