El mandril, uno de los primates más grandes del mundo
¿Quién no conoce o ha visto alguna vez a este peculiar mamífero? El mandril es una especie de primate de la familia de los cercopitécidos, o monos del viejo mundo, que habita en el oeste de las zonas tropicales de África, desde Guinea Ecuatorial hasta el Congo. La mayor parte de su tiempo se mantiene oculto en selvas lluviosas y otros bosques, aunque también es posible verlo en las sabanas y otros campos con vegetación menos alta. De hecho, a pesar de que en el ecosistema en el que habita la vida se desarrolle, principalmente, en los árboles, el mandril hace vida terrestre, contando con un cuerpo perfectamente adaptado para ello.
Reconocer a este primate no es nada difícil, ya que el color pardo oliváceo de su pelaje y la coloración azulada y rojiza de su cara y trasero nos desvelan fácilmente su identidad. El color de los machos es mucho más vivo, con hocicos rojos y azules y profundas estrías a los lados. El color de las hembras, sin embargo, es mucho más apagado. Por otro lado, la tonalidad del trasero tiene una función más que útil para ellos, y es que les sirve para ganar visibilidad y para que, a la hora de recorrer la densa vegetación de la selva, el grupo pueda seguir manteniéndose unido.
Otra gran diferencia entre machos y hembras es que los machos son mucho más grandes que las hembras, ya que pueden llegar a pesar más de 30 kg mientras que las hembras apenas alcanzan los 15. Otra característica de ellos, tal y como ya hemos citado antes, es que el mandril se mantiene en grupos que pueden llegar hasta los 250 miembros y cuenta con una jerarquía dentro de los mismos.
Vía | Wikipedia
Foto | Flickr-jinterwas