¡No más podas innecesarias!

Durante los meses de invierno, es el periodo de la poda de árboles, que a menudo se confunde con la tala, dejando el tronco prácticamente “desnudo”. El problema está en que ahora ya parece algo normal, siendo estos casos abundantes en cada una de las poblaciones españolas.

Por lo general, se tiende a pensar que es necesaria la poda de los árboles urbanos, ya que el corte de las ramas hace que en primavera crezcan mejor. Pero, es un concepto totalmente erróneo, ya que, en realidad, los árboles se debilitan, enferman y finalmente mueren. Además, podando cada año los árboles, estos no pueden cumplir la función de proporcionar sombra y belleza en la ciudad.

El hecho de la poda anual, se ha generalizado para todos los árboles mientras que la razón en sí recae en los árboles frutales de las zonas rurales, los cuales necesitan la poda para proporcionar frutos a la temporada siguiente. Expertos proponen que solamente es necesario retirar las ramas secas o enfermas del árbol, y que con todos los cortes de ramas se consigue que sean susceptibles a virus y hongos.

Además, los árboles han evolucionado a lo largo del tiempo, sin la necesidad de la presencia del hombre. Tal vez el problema principal es la mala elección de los árboles plantados, debido al espacio de la calle, o por haber sido plantados demasiado juntos o por plantarlos sobre un terreno poco apropiado para esa especie. Entonces, el motivo de la poda anual se traduciría en intentar quitar del medio las ramas que molestan el paso de los viandantes o coches.

No debemos de olvidar que los árboles en la ciudad aportan un toque de naturaleza en medio de asfalto y hormigón, y al mismo tiempo son capaces de capturar partículas contaminantes y emitir oxígeno.

Vía | El Mundo

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