Normas para perros en las piscinas para animales

Al ver el título de la entrada más de uno podría pensar que podemos entrar en las piscinas públicas con nuestro perro. No, no es así. Nos referimos a las piscinas especialmente dedicadas a estos animales, o de uso compartido con ellos. Incluso estos sitios tienen normas específicas que hay que respetar, por lo que tenemos que echarles un vistazo.

Antes de nada: los dueños de las mascotas somos responsables de los daños que puedan provocar estas. Además, para ir a piscinas en las que admitan perros es imprescindible que estos estén en perfecto estado de salud, y que la cartilla sanitaria esté actualizada, incluyendo vacunas y desparasitaciones.

Las propias instalaciones requieren respetar una serie de normas. Por ejemplo, todos los perros que vayan a parques acuáticos o a piscinas para perros tienen que estar identificados con microchip. Imprescindible también que llevemos bolsas de plástico con las que recoger las heces de los animales. El abandono de las mismas, como ya sabéis, es un delito. Por supuesto, no se puede comer dentro de las propias piscinas.

Otras normativas, en ocasiones específicas de las piscinas, impiden que nos bañemos con los animales, que cada piscina esté designada a un determinado tipo de can, o simplemente que no podamos acceder con accesorios o bebidas. Tampoco podemos olvidar las leyes sobre los perros potencialmente peligrosos. Al respecto es mejor consultar las normativas que ponga en marcha cada instalación.

En cualquier caso, sabed que los perros disponen de piscinas tanto de uso exclusivo como compartido, por lo que podéis visitarlas con el fin de que los animales se refresquen. Eso sí, no debéis olvidar cumplir las normas que se especifican en las instalaciones.

Foto | Pixabay – dassel

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