¿Por qué los pterosaurios no son dinosaurios?

Es habitual que, si vemos a algún animal con el vocablo saurio añadido a su nombre, enseguida pensemos que se trata de un dinosaurio. No obstante, de los propios pterosaurios se dice que pertenecen a los tipos de animales mencionados anteriormente. Aunque parece que no es así. En realidad, el término dinosaurio se refiere a grandes lagartos que se extinguieron hace aproximadamente 68 millones de años.

Se dice que los dinosaurios aparecieron en la Tierra hace aproximadamente 250 millones de años. Son un grupo de reptiles que ponen huevos, que tienen dos agujeros tras sus cavidades orbitarias, con extremidades bajo su cuerpo, tres vértebras sacras y un agujero central en la pelvis. Por lo tanto, estas características deben ser compartidas por aquellos animales a los que queramos llamar dinosaurios.

Los pterosaurios no cumplen las características comentadas, aunque sí son reptiles que convivieron con los mismos. De hecho, los más grandes llegaron a sobrepasar los 12 metros de envergadura, evolucionando para conseguir unas alas sorprendentes y parecidas a las de los murciélagos.

En definitiva, aunque se dice que son dinosaurios debido al aspecto que tienen, no cumplen con las características de las que deben disponer este tipo de animales. Es cierto que podían volar, que eran feroces y que podrían haber asustado a cualquier persona, aunque tenemos que descartar de manera definitiva que fueran dinosaurios. Al menos, no las especies de pterosaurios que conocemos en la actualidad.

Vía | Smithsonian
Imagen | Wikimedia Commons – Dmitry Bogdanov

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