La supervivencia del elefante en el punto de mira

La supervivencia del elefante en el punto de mira

Escrito por: Jorge Rubio    22 septiembre 2016    2 minutos

Los elefantes son unos de los animales más majestuosos del planeta, unos seres que han cautivado al ser humano desde los albores de la historia. Una admiración que no se ha correspondido con el respeto y que en muchos casos han conducido a estos animales a una situación de extrema precariedad a lo que su supervivencia se refiere. La caza furtiva por el codiciado marfil, las guerras y la destrucción de su hábitat han llevado a estos seres a una situación peliaguda.

El futuro de los elefantes tiene una cita clave en Johannesburgo (Sudáfrica) del 23 de septiembre al 5 octubre de 2016, donde se producirá la 17ª reunión de la Conferencia de las Partes (CoP17) de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES). Una conferencia con la que intentará prohibir de manera definitiva el comercio de marfil en el mundo junto a otras múltiples propuestas destinadas a evitar la caza de especies amenazadas en todo el planeta.

Algunas de las propuestas que afectan de forma directa al elefante africano son las siguientes: prohibir el comercio internacional de marfil, cerrar los mercados de marfil nacionales en todo el mundo, destruir las reservas de marfil, detener las negociaciones sobre la legalización del marfil bruto y restringir el comercio de elefantes vivos. Con estas medidas se espera que la situación de los elefantes africanos mejore y se reduzca el impacto de la caza furtiva sobre los mismos.

Precisamente la prohibición del comercio de marfil, tanto legal como ilegal, es una de las principales claves en esta lucha. Amparados en las transacciones legales de este material, los furtivos y organizaciones ilegales han encontrado los resquicios necesarios para continuar sus actividades. Eliminando este tipo de comercio, se espera que las trabas sean mayores y que aunque no desaparezca de forma definitiva en sus cauces ilegales, al menos el impacto sea mucho menor del que tiene hasta ahora.

Fuente | El diario.es

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