Salvajes
La lagartija colirroja usa su colorido como señuelo
El uso del color en la naturaleza es algo muy extendido y se utiliza en múltiples y variadas estrategias. Una de las más usadas es para camuflarse o asustar a los posibles depredadores para ahuyentarlos, aunque hay otros usos más sorprendentes. Por ejemplo, un reciente estudio ha descubierto que los ejemplares jóvenes de lagartija colirroja (Acanthodactylus erythrurus) utilizan su color rojizo para que las agresiones de sus depredadores se dirijan a puntos no vitales de su anatomía.